Tras la marcha de Ben Affleck en calidad de director de la próxima película de Batman, Warner Bros. contrató a Matt Reeves para hacerse cargo del proyecto. Sin embargo, aunque inicialmente se informó que el trato estaba cerrado, después se dijo que Reeves había abandonado las negociaciones para poco después anunciarse oficialmente que Reeves será el director del filme.
Ahora, Slash Report afirma que antes de Batman v Superman: El Amanecer de la Justicia, Warner Bros. no metía mucha mano en las películas basadas en DC Comics y dejaba a los directores usar su propia visión. Pero cuando se hacían las pruebas de pantalla, Warner Bros. decidía involucrarse más, lo que resultó en cambios notables en Batman v Superman y Escuadrón Suicida.
Se dice que esta involucración del estudio es la razón de que perdiesen a tantos directores, ya que Warner Bros. quiere más control creativo. Esto es lo que habría provocado que Reeves rechazase inicialmente el proyecto de Batman, y que James Wan casi abandonase también el de Aquaman.
La publicación afirma que Matt Reeves quería control total sobre la propiedad de Batman, algo similar a lo que consiguió Wan con la de Aquaman. Según el informe, Reeves lo ha conseguido, y lo que quiere hacer con ello es construir un mundo para Batman que no solo use las ideas y el guión de Ben Affleck, Geoff Johns y Chris Terrio.
También se dice que el Universo Cinematográfico de DC está actualmente en estado de cambio constante, y solo Aquaman está sobre la mesa tras La Liga de la Justicia. La película de Flash habría entrado en fase de diseño, sin director asociado ni guión, y la película de Cíborg habría caído en el limbo.